Al tiempo que vivimos inmersos en la revolución digital, los relojes analógicos de mujer están paradójicamente en alza. ¿Por qué? Precisamente porque no son necesarios. Todas tenemos un móvil que nos dice la hora, pero la moda -entendida en sentido estricto- es todo menos funcional, y sus adeptos disfrutan eligiendo y luciendo símbolos por el mero hecho de serlo, contando historias a través de sus complementos. Coincide con un momento en el que las fronteras de género se están difuminando y la moda femenina ha interiorizado elementos masculinos de forma endémica. Incluso los looks más típicamente de mujer de faldas y sandalias de fiesta necesitan incorporar un toque masculino, precisamente para rebajar feminidad y ganar modernidad. Y ahí es donde los relojes de mujer entran en juego, pues aportan mucho pese a su reducido tamaño.
Relojes analógicos de mujer para un plus de modernidad
No es de extrañar que los relojes analógicos de mujer que más popularidad están ganado sean precisamente los más parecidos a los de los hombres: relojes grandes, de semblante clásico y a menudo con cronómetro. En Zalando verás que reinterpretan el pasado en base a las tendencias actuales, bien sea con diseños más minimalistas, con adornos inesperados o con materiales sorprendentes, como el carey o incluso la madera, que pasan a sustituir al metal de las tradicionales pulseras de eslabones. Los relojes masculinos y los deportivos quedan particularmente bien con los looks casual más neutros, como unos vaqueros desgastados combinados con jersey gris y zapatos nude de tacón. Para quienes no son amigas de tanta sencillez, existen versiones con pequeñas piedras de vidrio en la caja o la esfera, una tendencia que arrasa entre las celebrities y que aporta un grado extra de sofisticación apto también para los modelitos de noche. Pero más allá de modas, los relojes clásicos de mujer son una elección íntima que debe transmitir la personalidad de quien los lleva.
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