Destaca por unas prendas de sastrería impecables, camisas con botones que equilibran el estilo masculino y la feminidad sin esfuerzo, y una paleta de colores anclada en los icónicos rojo, blanco y azul de Tommy. Se inspira en la estética preppy universitaria del estilo americano clásico, pero con un aire más maduro: una sofisticación refinada, pero siempre accesible.