Si se trata de representar los clásicos estereotipos británicos, Kit Price deja un poco que desear. En primer lugar, no bebe té. «Podría contar con los dedos de una mano las veces que he bebido té en mi vida», dice, poniendo fin antes de empezar a cualquier conversación sobre cómo toma esta bebida. En segundo lugar, se crio en Malasia: no solo va de decepción en decepción por la falta de especias en el Reino Unido, sino que pasó casi toda la infancia en bañador en la playa sin coger ni un gripazo, claro.
Eso sí, cuando se le conoce, es evidente que no podría ser más británico. Es encantador, supereducado, graciosísimo y muestra la misma energía bromista que encanta a sus 1,1 millones de seguidores en TikTok. También rebosa confianza y lleva un conjunto impecable, aunque eso quizá entra en las expectativas que teníamos: a sus 23 años, ya ha desfilado como modelo para firmas como Dior, Armani y Burberry, lo que le ha supuesto su primera invitación a los premios Óscar.
Por estas y otras muchas razones, hemos querido colaborar con él en este episodio de THE FITTING ROOM, que está dedicado al estilo de chico británico. Al igual que Kit, la estética de chico británico no tiene una descripción clara. Sin embargo, aunque no pueda resumirse en una sola palabra, sigue reflejando el Reino Unido a la perfección. Algunas de sus versiones incluyen el punk casero de Vivienne Westwood y Malcolm McLaren, los conjuntos de Stone Island de los miembros de Oasis y las chaquetas de chándal adidas de Blur, chicos con abrigos Burberry y tweed vintage de aire campestre, y la extravagancia discreta de iconos del rock como los integrantes de The Rolling Stones y Led Zeppelin. Se podría decir que el look de chico británico es, ante todo, una cuestión de actitud.
Y a la hora de hacer realidad esa actitud, nuestros concursantes Yaya, Elli, Ourania, y Gigi no podrían haberlo hecho mejor.